Miguel Camacho: "En el PRM va a ser candidato presidencial el que no tenga que ensayar para verse cercano a la base del partido"

Santo Domingo, República Dominicana. — El presidente del Movimiento Avanzada Democrática Moderna, ingeniero Miguel Camacho, afirmó que el próximo candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM) será aquel que no necesite actuar ni ensayar para mostrarse cercano a la militancia de base, sino que tenga una conexión real, natural y comprobada con la gente.

"En el PRM va a ser candidato presidencial el que sea más cercano a la base, el que no tenga que ensayar para verse cercano a las bases del partido y el que tenga trayectoria partidaria", dijo Camacho.

En ese sentido, Camacho, reconocido por su trayectoria como dirigente y su estilo directo, aseguró que en esta nueva etapa del PRM, la legitimidad popular no se construye en estudios de grabación ni en oficinas publicitarias, sino en el terreno, con la gente, “mirándola a los ojos y sin disfrazarse para parecer lo que no se es”.

"Aquí no estamos hablando de quién tiene más presupuesto, sino de quién ha sembrado vínculos reales con los dirigentes, con los presidentes de comités de base, con los comunitarios, con los que caminan el día a día del partido", expresó Camacho durante una entrevista en Despertar Político.

Además, puntualizó que la base del PRM es más consciente que nunca, y que no se dejará seducir por candidaturas “fabricadas”, sin historia ni compromiso con la organización.

Camacho manifestó que "todo tiene su tiempo, hay gente que se está vendiendo hace más de 10 años, hay otros que no, pero para poner un ejemplo, Carolina Mejía es la candidata en la historia que más gente ha votado por ella en el Distrito Nacional", en momentos que la carismática alcaldesa opta por la candidatura presidencial del PRM de cara al 2028, en un escenario post-Abinader.

Finalmente, llamó a los dirigentes a respetar la inteligencia del militante perremeísta, “que no está en venta ni es ingenuo”, y a construir candidaturas desde abajo, con trabajo auténtico y sin imposturas.